martes, 11 de agosto de 2020

LA VIOLACIÓN DE DERECHOS HUMANOS.

 EL RESPETO POR LA DIGNIDAD DE LAS PERSONAS

Los Estados tienen la obligación de proteger y hace cumplir los derechos de sus habitantes mediante sus acciones que les brinden la posibilidad de hacer efectivos sus derechos. Y deben abstenerse de tomar medidas que limiten el ejercicio de estos. El ámbito ideal para ello es el sistema democrático, ya que solamente en un marco que

proteja los principios de la libertad y de la igualdad ante la ley es posible llevar adelante políticas que promuevan la plena vigencia de los derechos.


La base del respeto a la dignidad humana está relacionada con el desarrollo del respeto a los derechos humanos. Estos derechos se tienen por la simple condición de ser personas, como el derecho a la vida, a la libertad y a la igualdad. Fueron uno de los fundamentos de la Revolución Francesa, en 1789, y serian luego incorporados en las leyes de la mayoría de los países. Sin embargo, hubo acontecimientos que vulneraron gravemente a la dignidad humana, como la Primera y Segunda Guerra Mundial.  A mediados del siglo XX,  se acuño el término “derechos humanos” y se crearon instrumentos legales a nivel internacional para protegerlos.

Todos los seres humanos somos personas. Entonces, la dignidad de las personas... ¿está en manos de las propias personas? Por supuesto. Solo los seres humanos  lograremos proteger la dignidad de los seres humanos. Esto parece una obviedad; sin embargo, a diario somos testigos del sufrimiento de muchas personas porque su dignidad se ve dañada por otras personas. Para que eso no ocurra, hace falta tener en cuenta tres cosas:

  • Respeto por el otro. Tratar con cuidado, con cortesía, con dedicación a todo ser humano, reconociendo que es una persona por encima de cualquier otra condición. Nunca reducir a una persona al colectivo al que pertenece(es mujer, es un negro, es un musulmán, etc.). Todos somos, en primer, lugar personas.
  • Tolerancia. Convivir con los demás respetando sus ideas, acciones y opiniones aun cuando no son iguales a las nuestras, siempre y cuando no dañen la dignidad de otras personas. La tolerancia promueve la convivencia entre las distintas culturas que viven en una nación y entre distintas naciones.
  • Solidaridad. Sentirnos parte de la sociedad, tener una actitud de participación y apoyo frente a los problemas de los demás.

El respeto, la tolerancia y la solidaridad son valores, tal vez los más importantes. No nacemos teniendo esos valores, los aprendemos a medida que reflexionamos y los ponemos en práctica.

GENERACIÓN DE DERECHOS HUMANOS.

 Las tres generaciones de Derechos Humanos.


  El reconocimiento legal de los derechos humanos ha tenido una larga historia. Algunos derechos han sido incluidos en las leyes mucho antes que otros, que sólo han sido aceptados después de largas luchas sociales. Por eso podemos clasificar los derechos en grupos, a los que se suele denominar las tres generaciones de los derechos humanos.




GENERACIÓN DE DERECHOS

ÉPOCA DE ACEPTACIÓN

TIPO DE DERECHOS

VALOR QUE DEFIENDEN

FUNCIÓN PRINCIPAL

EJEMPLOS

Primera

S. XVIII y XIX

Civiles y políticos

LIBERTAD

Limitar la acción del poder. Garantizar la participación política de los ciudadanos.

Derechos Civiles: Derecho a la vida, a la libertad, a la seguridad, a la propiedad…
Derechos Políticos: Derecho al voto, a la asociación, a la huelga…

Segunda

S. XIX y XX

Económicos, Sociales y Culturales

IGUALDAD

Garantizar unas condiciones de vida dignas para todos

Derecho a la salud, a la educación, al trabajo, a una vivienda digna…

Tercera

S. XX y XXI

Justicia, paz y solidaridad

SOLIDARIDAD

Promover relaciones pacíficas y constructivas

Derecho a un medio ambiente limpio, a la paz, al desarrollo…


  • La primera generación incluye los derechos civiles y políticos. Estos derechos fueron los primeros en ser reconocidos legalmente a finales del siglo XVIII, en la Independencia de Estados Unidos y en la Revolución Francesa. Se trata de derechos que tratan de garantizar la libertad de las personas. Su función principal consiste en limitar la intervención del poder en la vida privada de las personas, así como garantizar la participación de todos en los asuntos públicos. Los derechos civiles más importantes son: el derecho a la vida, el derecho a la libertad ideológica y religiosa, el derecho a la libre expresión o el derecho a la propiedad. Algunos derechos políticos fundamentales son: el derecho al voto, el derecho a la huelga, el derecho a asociarse libremente para formar un partido político o un sindicato, etc.
  • La segunda generación recoge los derechos económicos, sociales y culturales. Estos derechos fueron incorporados poco a poco en la legislación a finales del siglo XIX y durante el siglo XX. Tratan de fomentar la igualdad real entre las personas, ofreciendo a todos las mismas oportunidades para que puedan desarrollar una vida digna. Su función consiste en promover la acción del Estado para garantizar el acceso de todos a unas condiciones de vida adecuadas. Algunos derechos de segunda generación son: el derecho a la educación, el derecho a la salud, el derecho al trabajo, el derecho a una vivienda digna, etc.
  • La tercera generación de derechos ha ido incorporándose a las leyes a finales del siglo XX y comienzos del siglo XXI. Pretenden fomentar la solidaridad entre los pueblos y las personas de todo el mundo. Su función es la de promover unas relaciones pacíficas y constructivas que nos permitan afrontar los nuevos retos a los que se enfrenta la Humanidad. Entre los derechos de tercera generación podemos destacar los siguientes: el derecho a la paz, el derecho al desarrollo y el derecho a un medio ambiente limpio que todos podamos disfrutar.


LA DIGNIDAD DE LAS PERSONAS.


 La Dignidad de las personas.

La dignidad humana consiste en reconocer que cada persona es merecedora de respeto y de derechos por el solo hecho de ser  humano, sin importar sus condiciones o característica propias.  El reconocimiento y la aceptación de las diferencias hacen a las personas dignas y libres, y confirman la virtud y la propia dignidad del individuo que se basa en el respeto hacia los demás.

En la actualidad, la democracia, el derecho y la justicia se basan en el principio de la dignidad humana. Esto significa que por el solo hecho de ser personas a todas las personas les corresponde, sin ningún tipo de diferenciación, gozar de todos los derechos. En otras  palabras, por su propia naturaleza humana, todas las personas son dignas y merecedoras de respeto. Vivir  dignamente consiste entonces en poder satisfacer nuestras necesidades básicas y realizarnos como personas.

Todas las personas tenemos un carácter único pero a la ve diferentes. Sin embargo, a pesar de las diferencias que podamos tener en cuanto a nuestro aspecto físico, las personas somos iguales en nuestra naturaleza humana, porque somos libres, podemos tomar decisiones, comunicarnos y construir cultura. Entonces, esa esencia humana es lo que hace digna  a cada  persona.



La dignidad de los seres humanos.

¿Qué significa  ser digno? La palabra “dignidad” deriva del adjetivo latino dignus, que se utiliza para referirse a alguien “valioso”. Se puede ser valioso por alguna condición especial o por  algún atributo, por ejemplo, una científica que hace un descubrimiento, un deportista muy habilidoso o una persona que realiza un acto solidario. También alguien que se arrepiente de algo que hizo mal es digno de perdón. Todos los seres humanos somos valiosos tan solo por el hecho de ser personas, por eso merecemos respeto y tenemos derechos.

A lo largo de la historia  diferentes culturas tuvieron presentes el concepto de dignidad humana, pero no todas las personas eran reconocidas como iguales, de modo que no tenían los mismos derechos. En la antigüedad era natural aceptar las diferencias basadas en el parentesco o lazos de sangre. La cuestión de la dignidad humana aparece humana aparece pro primera vez entre los filósofos griegos y, luego, entre los romanos. Durante la Edad Media se consideró que la dignidad humana estaba fundada en que las personas habían sido creadas a imagen y semejanza de Dios. Los seres humanos demostraban su superioridad por sobre los animales a través de su alma, su fe y su razón. Pero los reyes, los nobles y los miembros de la iglesia tenían más privilegios  y derechos que el común de las personas.

Durante la Edad Media la idea de que el hombre era un reflejo de Dios comenzó a cambiar. A partir de los siglos XVII y XVIII, en Inglaterra y en Francia surgió una nueva concepción que sostenía que todos los seres humanos sin distinción eran dueños de sus derechos: solo por su condición humana tenían derecho a la vida, a la libertad, a la propiedad y a la seguridad. Estas nuevas ideas se convirtieron  en uno de los fundamentos de la Revolución Francesa de 1789, durante la cual la Asamblea Nacional aprobó la Declaración de los Derechos  del Hombre y Ciudadano.





LA VIOLACIÓN DE DERECHOS HUMANOS.

  EL RESPETO POR LA DIGNIDAD DE LAS PERSONAS L os Estados tienen la obligación de proteger y hace cumplir los derechos de sus habitantes med...